A finales de los años 80
y comienzos de los noventa, uno de los fenómenos más curiosos dentro del
devenir del Rock Duro español fue la aparición coetánea y espontánea de algunas
bandas de segunda generación, que fusionaban el estilo con el por entonces
resucitado pero siempre presente Rock Urbano. Esta coincidencia en el tiempo y
el espacio se dio sobre todo en entornos alejados del mínimo 'star system'
metalero que existía en Madrid, con músicos que no pretendían otra cosa que
buscar sus propias fórmulas para la evolución natural del Hard cantado en
castellano.
La irrupción de una banda
como Leize fue sintomática de un nuevo sentir artístico, más pegado a las
preocupaciones y vivencias del rockero español de toda la vida, sin las
servidumbres propias de la imagen estereotipada o los modos y maneras ya
conocidas. Las melodías adquirían mayor importancia, en tanto las letras
comenzaban a sensibilizarse con asuntos más sociales. Las preocupaciones y
visiones de la vida de sus autores se refugiaban ahora en lo personal, huyendo
así de la mera denuncia o militancia.
En el barrio de Vallecas
los “AC/DC madrileños” de Esturión hacían la guerra por su cuenta, mientras en
todo el norte peninsular comenzaban a dar señales de vida agrupaciones como
Gris Perla o los músicos navarros de la quinta de Rock DAM, Los del Rayo y
otros. Esta tendencia tuvo particular acogida en Madrid, donde en según qué
círculos Leize es casi un grupo intocable y adoptado como propio. En el Foro
gustaron mucho esos estribillos pegadizos y rítmicos de los autores de
“Buscando mirando”, que de algún modo también son los que caracterizan a
Randall.
Randall eran casi
vecinos, de la localidad de Álfaro, en La Rioja, donde surgieron en 1988 con la
intención fundamental de divertirse y, si había suerte, dejar constancia de su
talento para la melodía y el rock and roll guitarrero. Su única maqueta se
tituló como el propio cuarteto, que estaba formado por Jesús González (guitarra
y voz), Daniel Fernández (guitarra), Carlos Revilla “Jefry” (bajo y voz) y
Antonio Pérez (batería). “Jefry”, Daniel y Antonio, fundadores del combo,
habían encontrado por fin la voz que querían para visibilizar sus composiciones
instrumentales. La demo ha sido recuperada ahora por Iberia Metálica, ese sello
que está poniendo patas arriba el rescate y la reivindicación de discos y
grabaciones ocultas de la dorada década del Heavy patrio.
“Randall” fue grabada y
mezclada en los estudios Kikos de Zaragoza -aún en funcionamiento-, donde ya
habían hecho de las suyas bandas como Acolla o Las Novias. Sus instalaciones
habían sido inauguradas en 1986 y fue a finales de 1992 cuando recibieron la
visita del cuarteto riojano, que plasmó en cassette seis temas : “Que no te
enteras”, “Cuentos de rock”, “Por un trozo de pan”, “Entre mi espada y la
pared”, “Falsos rumores” y “Ley de leyes”. Fueron sólo 1.000 copias, que se
movieron con éxito de crítica y público por su zona de influencia y algunos
medios de comunicación centrales.
Nunca más volvieron a dar
soporte físico a sus canciones. El grupo duró en total unos diez años desde su
fundación, pero en 2010 se reunió en un concierto especial con motivo del
festival Alfarock. No fue una ocasión única, ya que sus componentes jamás cortaron
del todo su vinculación con el mundo de la música y cualquier ocasión era buena
para recordar los buenos tiempos y actualizar su legado, tan buscado por los
rastreadores de buen Hard Rock melódico hecho en la “piel de toro”.